Francisco Kemeny se refirió al impacto en lo laboral en un 1er momento. El experto fue invitado por ANDA el pasado 31 de mayo al país para exponer en el encuentro especial para socios sobre el potencial e implicancias de la Inteligencia Artificial en el marketing. Enlace
La inteligencia artificial (IA) conlleva una serie de oportunidades y desafíos, que implicarán cambios en el mercado laboral futuro, manifestó el experto en la materia radicado en México Francisco Kemeny, quien se refirió a los roles que adquirirán más importancia y otros nuevos que se generarán en el mercado con la instalación de esta tecnología. “Cuando hablamos de los nuevos roles mencionamos a los operadores de inteligencia artificial (IA), los llamados prompt engineer (especialista en instrucciones), que trabajan en la personalización de los grandes modelos de lenguaje y en las IA generativas”.
Kemeny agregó que “los profesionales del futuro deberán adquirir un conocimiento profundo de la programación en lenguaje natural, de modo de ser capaces de entregar instrucciones concretas para que el resultado de la IA sea específico y se genere valor. Actualmente, empresas como Microsoft imparten este tipo de conocimiento, aplicando técnicas que favorezcan el uso del lenguaje”.
A nivel técnico, expresó que los desarrolladores de software, ingenieros, van a tener que profundizar en la implementación de esta nueva tecnología.
El especialista fue invitado el pasado 31 de mayo al país por la Asociación de Avisadores de Chile, ANDA, para exponer en el encuentro especial para socios sobre el potencial e implicancias de la inteligencia artificial en el marketing. Ante la presencia de más de 40 socios, Kemeny habló sobre el tema. Algunas de las empresas e instituciones que estuvieron presentes fueron Unilever, Carozzi, BancoEstado, BCI, Banco Bice, Duoc UC, Universidad Santo Tomás, Cruz Verde, Banco Falabella, Banco Ripley, entre otras.
En entrevista con “El Mercurio” Kemeny precisó que a nivel de los usuarios, es decir, personas que realizan funciones dentro de las distintas ramas productivas, tendrán que repensar la posibilidad de aplicar la IA en sus procesos de trabajo. “Tendrá que producirse, además, una alfabetización en el uso de datos y en la programación en lenguaje natural para que la IA ejecute de manera correcta”.
Dijo que en el caso del marketing, por ejemplo, la IA permite optimizar campañas; en la logística, optimizar rutas, por ejemplo. Actualmente, en Chile ya hay empresas que han automatizado sus procesos, reduciendo los costos operativos, generándoles valor a sus clientes. Por ejemplo, algunas empresas ya aplican IA en la relación con sus clientes, tal es el caso de algunas empresas de telefonía”.
Sobre los profesionales que se van a ver favorecidos con la IA dijo: “Son aquellos que tienen alta capacidad verbal y escrita. Se privilegiará a aquellos profesionales con altas capacidades de dirigir más que de ejecutar, así como aquellos que tienen un pensamiento crítico más avanzado”.
Consultado por el “trauma” (despidos) que puede tener esta tecnología en nuestro mercado laboral en un primer momento, dada la poca preparación a nivel local en el tema, respondió que “los trabajadores que desempeñan tareas monótonas o con patrones repetitivos corren el riesgo de ir desapareciendo con el avance de estas nuevas tecnologías.
De hecho, funciones como ejecutivos de atención, o encargados de call center, asistentes personales, secretarias, traductores, o incluso, operarios, podrían ser reemplazados o reubicados en el futuro. Por tanto, en el corto plazo las empresas tendrán que hacer inversiones fuertes en tecnología, en capacitación y en la curva de aprendizaje de sus trabajadores”.
Añadió que el gran temor que existe es que “la IA está demostrando que es capaz de hacer cosas, por tanto, si no regulamos su campo de acción, la IA podrá pasar de la decisión a la acción”.
“En los primeros años vamos a ver un aumento en los despidos no por la IA, sino por la promesa y excusa que les da la IA a los dueños de los negocios respecto de su real potencial. Por lo mismo, las normativas y reglas claras sobre su campo de acción son claves para que la IA, más que un desplazamiento laboral del ser humano, contribuya a un trabajo más colaborativo. Para ello, las personas deben trabajar por entregar valor agregado a sus procesos”, indicó Kemeny.
El especialista concluyó que el avance acelerado de las nuevas tecnologías obligará a cambiar la forma de enseñar desde la educación inicial, con el objetivo de priorizar el pensamiento crítico y favorecer un tipo de lenguaje más descriptivo.
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