Legria busca facilitar el acceso a inmuebles vacacionales a través de un modelo de copropiedad. Con esta inversión intentan ampliar su cartera. Enlace
Con el objetivo de financiar la adquisición de nuevas propiedades clave para su plan de crecimiento en Chile, Legria, la startup chilena que busca facilitar el acceso a la segunda vivienda, acaba de anunciar un levantamiento de hasta $3 mil millones a través de la administradora de fondos Ameris Capital, por medio de deuda privada.
La proptech, que comenzó a operar recién en enero de este año, funciona a través de un modelo de copropiedad donde una persona compra una fracción de la propiedad y, en la práctica, paga solo por lo que usa, al mismo tiempo que es dueño de una parte del inmueble. “Al final, con este sistema, la cantidad de tiempo que vas a ocupar la casa probablemente es el mismo en que la hubieras ocupado si fueras el dueño único”, afirma el cofundador y CEO de Legria, Ignacio del Río.
“Lo que estamos haciendo es la gracia de compartir una casa, pero lo que hicimos fue resolver los ‘cachos' de tener que lidiar con copropietarios. Entonces, nuestros copropietarios no tienen ni por qué conocer a los otros. Nosotros nos preocupamos de todo. La casa tiene un estándar, ya viene decorada y equipada, y nosotros nos encargamos todo el rato de mantenerla”, explica el ingeniero de la Universidad Católica y MBA del MIT.
Las casas están conformadas por un máximo de ocho dueños, por lo tanto, ocho fracciones, y cada fracción equivale a disfrutar de 44 días dentro de un año. Desde Legria aseguran disponibilidad de una semana en temporada alta, una semana en fechas festivas y cuatro semanas “normales”. A través de su app, los copropietarios pueden agendar sus fechas con anticipación y de forma equitativa y flexible, todo sin tener contacto con los otros copropietarios.
Esta inversión desempeñará un papel fundamental en la expansión de su cartera de propiedades, con compras previstas en Marbella, Zapallar, Cachagua, Maitencillo, Las Tacas, Villarrica, Pucón y Lago Ranco. Además, tienen presencia en Miami, donde comenzaron a operar con su primera propiedad en junio de este año. “La entrada a Estados Unidos fue porque estábamos ofreciendo nuestras propiedades en el litoral central y los clientes nos dijeron que les encantó el concepto, pero que querían comprar una fracción en Miami. Y ahí dijimos por qué no y empezamos a ofrecer una”, cuenta el emprendedor, quien actualmente reside allá.
El desafío de lo nuevo
“Ya teniendo copropietarios y viendo la experiencia de ellos, tenemos la convicción ya empírica del valor que le agrega a la gente poder tener un lugar al cual pueden escaparse de manera frecuente, y no solo en el verano, y generar un vínculo con el lugar y lo conveniente que es el modelo en un sentido económico”, afirma.
Pero el desafío no fue menor. “Nosotros vinimos a introducir algo nuevo y eso en Chile es un tremendo desafío. Y por eso estamos tan orgullosos de lo que ha sido este primer año, de tener ya clientes que han sido capaces de jugársela y que nos han dado este buen feedback de todo lo que les aporta, pero lograr cerrarlos a ellos fue luchar contra toda la barrera que tiene la gente contra lo nuevo y eso es súper desafiante”, reflexiona.
A través de este financiamiento y con lo que están haciendo en Estados Unidos, el foco ahora es ejecución y seguir aumentando el número de copropietarios. Para el próximo año, la idea es levantar una ronda semilla que les permita seguir creciendo en términos de ubicaciones y su capacidad de poder atender las operaciones.
“La inversión en deuda privada refleja nuestra confianza en la capacidad de Legria para transformar el mercado proptech en Chile. Valoramos su visión innovadora y su objetivo de democratizar el acceso a segundas viviendas. Esperamos ser parte de su éxito continuo y contribuir a su crecimiento en Chile y América Latina”, indicaron desde Ameris.
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