Tres académicos desglosan las cifras entregadas este viernes por el INE. Enlace
Preocupante. Así califican diversos economistas los datos de desempleo del trimestre junio-agosto de 2023 dados a conocer este viernes por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE). La tasa de desocupación para el periodo se situó en 9%, con un alza del 1,1% en doce meses, la décima consecutiva que registra el indicador desde el segundo trimestre de 2021, cuando fue de 9,5%.
Con respecto al trimestre móvil anterior, la variación fue de 0,2% y, por géneros, el indicador se situó en 9,3% en el caso de las mujeres y de 8,8% en el de los hombres, con aumentos de 0,3% y 0,2%. respectivamente.
Por sector económico, el informe señala que los sectores que tuvieron una variación positiva en la tasa de ocupación fueron comercio, con 4,1%; las actividades de salud, con 9,9%; la administración pública, con 12,0%, y el transporte, con 5,9%. Los principales descensos fueron en la construcción, con -8,6%; hogares como empleadores, con -10,9%, y agricultura y pesca, con -4,2%, señala el reporte del INE (ver tablas).
Juan Bravo, director del Observatorio del Contexto Económico de la Universidad Diego Portales, es uno de los especialistas que ve con preocupación las cifras.
"Llevamos diez alzas consecutivas en las tasas de desocupación y esta es la mayor desde que comenzó a subir la curva en el trimestre septiembre-noviembre de 2022. Ahí tuvimos la primera, después de caídas sucesivas, ya que hubo un periodo de recuperación del mercado laboral después de la crisis", señala.
Según el economista, dos son los factores que definen la racha negativa: la contracción económica y la estacionalidad. "La racha de diez alzas comienza justo cuando la actividad económica se empieza a contraer. Llevamos tres trimestres consecutivos de caída anual de la actividad económica y, por supuesto, eso generó un impacto en los ritmos de creación de empleo, porque cuando se producen menos bienes y servicios, entonces también las necesidades de contratación se reducen", agrega el economista.
Tomás Flores, académico de la Universidad Bernardo O'Higgins y economista de Libertad y Desarrollo, coincide con el diagnóstico.
"El factor más relevante es la menor capacidad de la economía de crear empleos. En las últimas seis encuestas, la tasa de creación de empleo era de 200 mil puestos respecto al año anterior y en esta bajó a 150 mil. Lo que pasa es que, por un lado, se ha debilitado la creación de empleo y, por otro, la gente sigue buscando trabajo. Estos datos son una luz amarilla, porque nos llevan de vuelta a situaciones que habíamos visto en la pandemia y plantean con urgencia la necesidad de tomar medidas pro empleo", agrega.
El otro factor es la estacionalidad, según afirma Bravo.
"Hay sectores generadores de empleo que decaen mucho en invierno, como la agricultura, el comercio, el turismo y el sector de restaurantes. En esta época contratan menos personas y desvinculan a más personal, y en el verano ocurre lo opuesto. Por eso las cifras hacia fin de año van a mejorar. Con todo, la estacionalidad sólo explica por qué en este momento la tasa está en ese nivel, pero la tendencia la da la contracción", agrega.
"Una conclusión que se desprende de este informe es que las cifras desmienten que la creación de empleo asalariado formal en el sector privado ha sido resiliente a la contracción económica", señala Bravo.
Desde la perspectiva de los reclutadores, Rodrigo Gorostiza, gerente de marketing de Trabajando.com, indica que los índices ratifican la situación de las ofertas laborales. "No han repuntado en los últimos cinco meses. Hoy tenemos un promedio de 20 mil y debiera ser el doble", indica.
En el Gobierno, la ministra del Trabajo, Jeanette Jara, señaló que los datos no los dejan satisfechos. "Es evidente que existe un sector importante de la población que ha salido a buscar empleo, que antes no estaba en esa búsqueda, así como también personas que, habiendo estado antes (en ello), hoy no lo han encontrado".
Jara, sin embargo, hizo ver el tema estacional. "En esta última cifra se muestra un alza que tiene mucho que ver con la estacionalidad. Esto quiere decir que, si nosotros revisamos lo que suele ocurrir con la cifra de desempleo en Chile durante la época del invierno, este es un fenómeno más habitual de lo que uno quisiera".
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